martes, agosto 16, 2005

De almuerzos y tortas poblanas

Hoy descubrí por qué las fondas mexicanas siguen siendo tan entrañables para el parroquiano de a pie. Apenas son unos dólares, es cierto, tres y medio para ser exactos, pero el almuerzo de hoy en "Bajo el cielo de Jalisco" me devolvió el sentido de gratitud y me ayudó a hacer una mañana más amable. Tanto que fui a Profética y me compré un libro, "Recetas de la Independencia". Vale la pena pasear por Profética, sobre todo por la mañana, cuando los snobs están curándose la cruda del coctel de la noche anterior, y la venerable casona respira el silencio de medio milenio erguida

Pero, vayamos por partes, porque en esta historia también aparece una tortería: Tortas Luis. Se trata de un establecimiento que ha sobrevido a los años, justo frente al convento de San Agustín, casi en la esquina de la 5 Poniente y la 5 Sur, en el Centro Histórico de mi adorada Puebla. Ahí mismo, en un local modesto y muy limpio, se preparan las deliciosas tortas "Luis" a la usanza poblana tradicional: torta de agua, ingredientes seleccionados y una atención esmerada y rápida.

Comencemos la visita a esta tortería describiendo, valga la aparente redundancia, la famosa torta de agua: Se trata de una especie de telera pequeña, de textura un tanto crujiente, muy parecida a la chapata. No conozco otro lugar con un tipo de pan parecido. Las tortas, pues, compiten con elegancia contra quien se les ponga enfrente -a propósito, otras tortas espléndidas, las de la 9 norte, entre Reforma y la 2 Poniente. Lástima del mal genio de las tenderas-.

Tortas Luis ofrecen una bien surtida lista de especialidades. Les sugiero comenzar con un buen caldo de pollo, que se sirve con delicadas rebanadas de aguacate y croutones de la casa. Hagan espacio, porque vienen las tortas de pierna o de milaneza. La pregunta, es obligada "¿con mantequilla o con frijoles?" expondrá el camarero. Mi sugerencia es que pidan una combinación o que, si van acompañados, prueben algunas especialidades al centro.

En esta época, la venerable tortería ofrece Chiles en Nogada. No los he probado pero, a juzgar por los comensales que al mediodía se agolpan en las mesas del lugar, deben ser una delicia.

(continuará...)

Aldrin Lenin Gómez-Manzanares

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bien. Las "Tortas Luis" son una verdadera tradición poblana. Y ese caldito es levantamuertos. Recomiendo la de pierna adobada, aunque recomiendo mucho cuidado en la manipulación de la torta, que se puede convertir en un peligroso mancha-camisas